domingo, 24 de abril de 2011

El Sexto, la novela gay de Arguedas

Si definimos una novela gay como aquella en donde una relación homosexual es parte importante de la trama, tendríamos que aceptar que El Sexto, la novela escrita por Arguedas basada en su experiencia en prisión en el año 1937,  es una novela gay.

José María Arguedas (Andahuaylas 1911 – Lima 1969) había publicado su primer libro, "Agua", en 1935, cuando estudiaba en la facultad de Letras de la Universidad San Marcos. Eran años de permanente agitación, con conatos revolucionarios en Ayacucho, Huancavelica y Huancayo y disputas permanentes entre apristas y comunistas. Sánchez Cerro (el “hijo del pueblo”) había sido asesinado en 1933 por un militante aprista y el Congreso había nombrado al General Oscar R. Benavides como nuevo presidente peruano con el mandato de pacificar el país.

En mayo de 1935 es asesinado el director de El Comercio, Antonio Miró Quesada, por un miembro del Partido Aprista. En 1936, apoyado por el APRA, gana las elecciones presidenciales Eguiguren, pero se anulan y se amplía el mandato de Benavides. En 1937 ocurren manifestaciones a favor de la República Española y en contra de la visita al Perú de un general fascista italiano que es recibido por Benavides. Es por su participación en estas manifestaciones por lo que apresan a Arguedas, que permanecerá en El Sexto durante 8 meses.

En la novela, la prisión "El Sexto" está dividida en 3 pabellones, uno sobre otro: en el primer piso están los presos peligrosos, los asesinos y los vagos, donde existen tres bandas dominantes, encabezadas por El Rosita (“un marica ladrón que vive sola en una celda”), Puñalada y Maraví; en el segundo piso los presos menos avezados, desorganizados, individualistas; y, en el tercer piso, los presos políticos, organizados en dos grupos: los apristas y los comunistas, con ideas irreconciliables. En toda la prisión se vive una tensa calma que, al final, explota, siendo el detonador las relaciones sexuales.

Al empezar la novela “Rosita” se ha propuesto seducir a un ex Sargento (lambayecano descrito simplemente como “un hombrazo”) que acaba de ingresar a prisión (al segundo pabellón) por estupro. Rosita consigue su propósito y provoca los celos del violento Puñalada, perdidamente enamorado  (“cuando sufría por Rosita pateaba a los pobrecitos vagos”).

Maraví, buscando evitar que la violencia de Puñalada, quien ha amenazado de muerte al ex Sargento, lleve a una guerra de bandas, le regala al cabecilla uno de sus favoritos, el hermoso “Clavel” (“Un muchacho de pelo largo [… de] pestañas largas, muy negras, seguramente pintadas […] su piel parecía suave como la de una criatura”).

Sin embargo, para dolor de Maraví, Puñalada prostituye a Clavel, cosa que termina por   provocar la protesta de apristas y comunistas que, para sorpresa y temor de las autoridades de la prisión, se unen por primera vez en torno a un objetivo común, llevándonos al final de una novela donde, si bien las relaciones homosexuales, de forma subterránea, van definiendo las principales motivaciones, hay muchos otros temas que, en la superficie, aparecen como principales: el aprendizaje del protagonista (Gabriel, alter ego de Arguedas) que observa a su alrededor todo un mundo nuevo, redención (de uno de los delincuentes), la cuestión política irresuelta, y la esperanza en el hombre común dentro del horror en el que convive.

En esta novela, con tintes de tragedia griega, hay un permanente ambiente de homoerotismo, violento y bizarro con historias como la del pianista:
“Contaban en el Sexto que este vago fue de veras un estudiante de piano, y que cayó al Sexto durante la celebración de un 22 de febrero. No tenía documentos y lo echaron al primer piso. “Puñalada” se lo envió a Maraví. Lo violaron tres maleantes durante la noche, y lo tuvieron encerrado en la celda durante cuatro días […] Cuando Maraví lo arrojó de su celda, durmió después en la de todos los ladrones y de los vagos, hasta en la del negro que mostraba por diez centavos su inmenso miembro viril.”
Después de “Agua”, Arguedas publica “Canto Kechwa” en 1938, luego “Yawar Fiesta” en 1941, “Los Ríos Profundos” en 1958. Recién en 1961 publica “El Sexto”, 24 años después de su experiencia carcelaria. Muere por su propia mano en el mes de diciembre de 1969.

Grabado digital en homenaje al centenario de Arguedas
por Javi Vargas Sotomayor

8 comentarios:

Damian dijo...

me voy corriendo a desenpolvar mi ejemplar de El sexto, que lo leí muy chiquito y no me acuerdo el contenido homoerótico del libro

Julio el del Ocio dijo...

Si, las menciones de Arguedas al tema son muy sobrias, a veces elípticas, no siempre muy explícitas. Como si JMA hubiera escrito ese libro criptografiado para que solo nosotros entendiéramos lo importante del trasfondo homosexual.

Creativo como todo ser humano. dijo...

Es claro que tu post es una tentadora invitacion para leer a JMA, pero no quedare alli, lo leere y volvere a comentar. Gracias por el valioso regalo.
Atte. Santi.

Julio el del Ocio dijo...

Gracias Santi. Espero tus comentarios entonces.

Creativo como todo ser humano. dijo...

Tal como lo prometi, aqui unos comentarios luego de haber leido "El Sexto" :
No es mi intencion contradecir, pero no creo que esta novela sea de tematica gay, mas bien creo que el tema gay y trans estan en segundo plano, como accesorio para redondear el submundo deprimente en esa carcel, tal es asi que en el prologo se menciona la palabra "degenerados", sobre todo teniendo en cuenta que fue escrita en 1961, diez años antes que la ciencia mundial aclarara que la homosexualidad no es una enfermedad mental.
Precisamente esta obra es mas descriptiva que narrativa, ya que no existe una historia central con objetivo, como en otros relatos suyos, sino mas bien un personaje central (el mismo JMA) que sirve de hilo para enlazar diferentes micro-historias, donde otros personajes secundarios aparecen y desaparecen.
Esto podria demostrar que a JMA, en esa epoca, no le interesaba crear alguna ficcion, sino tan solo describir la miseria de esa prision, asociandola con la miseria de la sociedad.
Esta demas decir que lo hace con un pasmoso estilo literario, detallado, sin barreras, vivido y testimonial.
Como dije al principio, no es una obra de tematica gay, sino mas bien una "HISTORIA DE HOMBRES" (este es un genero que yo he descubierto, sobre todo en el cine) siendo obvia su admiracion por los hombres, en varias escenas, al describirlos tanto fisica como espiritualmente, al margen de sus preferencias politicas y su racismo. Es mas, de sus pocas obras que he leido, no recuerdo que las mujeres fueran protagonistas.
De todos modos, esta es una historia enclavada en un lugar cerrado donde conviven hombres, algo comparable con la peli "Sueños de Fuga" o la super-novela "El Señor de la Moscas".
Atte. Santi.

Julio el del Ocio dijo...

Excelente comentario Santi. Muchas gracias.
Sobre la discrepancia, tendrías que decirme cual es tu definición de una NOVELA GAY que parece es diferente a la mía. La mía está en el texto: "aquella en donde una relación homosexual es parte importante de la trama". Y para mí el tema de las relaciones homosexuales en El Sexto, es fundamental en la trama. Si hay dudas sobre esto, solo hay que preguntarse: (1) cual es la razón que genera la unión de comunistas y apristas que los lleva a protestar contra la autoridad de la prisión (la respuesta es la prostitución de Clavel por parte de Puñalada), (2) Qué lleva a que Puñalada prostituya a Clavel (los celos de Puñalada por Rosita, que hicieron que Maraví le regale a Clavel).

Creativo como todo ser humano. dijo...

Bueno, segun los resumenes de cada libro que menciono en mi post que ya leiste, existe un PROTAGONISMO gay, ya sea del personaje y/o de la trama. En "El Sexto" no se da eso en el protagonista Gabriel, solo en forma secundaria en otros personajes como Rosita, Clavel, Puñalada, el Sargento y otros dos "usuarios" por alli. No hay una trama especial con comienzo y fin, y la homosexualidad es tan solo parte denigrante de ese inframundo corrompido que bien describe JMA. O sea, para esa epoca, la homosexualidad no era algo digno de reivindicar, y JMA sigue la corriente, siendo que por lo menos en Estados Unidos ya existia ese tipo de literatura desde 30 años antes. Desde ese punto de vista, JMA podria ser un reaccionario. Es mas, aprovecha el relato para mostrar su racismo contra los negros, eso lo hace mas imperfecto aun como ser humano. Lo que si cobra protagonismo es su preferencia politica a favor del comunismo, ya que aunque Gabriel se declare apolitico, JMA se deshace en describir la ideologia comunista, mas no con la ideologia aprista. Y como metalenguaje, habria que ser ciego para no captar su admiracion fisica y espiritual por los hombres (fornido, flaco, gordo, etc). De todos modos, dentro de lo obvio, JMA construye su formula de la podredumbre ( negros + homosexuales = miseria ) donde la unica esperanza es el comunismo.
Atte. Santi.

Julio el del Ocio dijo...

Si. A mi también me parece encontrar cierta admiración de Arguedas por el cuerpo masculino y por lo "macho" en general.